Tu
imam es tu intelecto, el único del que eres responsable. Aprende de quien
quieras, consulta a quien quieras, pero sólo tú eres responsable de tus
conclusiones y tus acciones, nadie rendirá cuentas por ti. Si dejas que otros
piensen por ti, entonces habrás anulado tu propia esencia y habrás despreciado
una de las mejores bendiciones que Dios te ha otorgado, tu intelecto. Cando uno
no usa su intelecto, entonces se ve incapaz de observar a su alrededor, incapaz
de escuchar atentamente lo que el mundo le grita. Y cuando anulas tu intelecto,
entonces cualquier ganado tiene más rango que tú. En cuanto a tu nafs, quién
únicamente puede guiarte es tu Señor.
¿Crees que la mayoría de ellos escuchan o razonan? La verdad es que
son como el ganado. No, aún más extraviados del camino. (25:44)
Y ha puesto a vuestro servicio lo que hay en los cielos y en la
Tierra. Todo ello procede de Él. En verdad, en ello hay señales para gente que
razona. (45:13)
Y
el fondo de estas cuestiones se puede resumir de la siguiente forma:
Una
espiritualidad sin intelecto no es más que una ilusión, y un intelecto sin
espiritualidad no es más que un lugar árido, vacío y estéril.