lunes, 5 de enero de 2015

MUSULMÁN-CREYENTE DIFERENCIAS


El Corán nos habla de Islam y de Iman (fe) y deja evidente la diferencia entre ser musulmán -muslim -y ser creyente -mu'min.
"Los beduinos dicen: "¡Creemos!" Di: "¡No creéis! Decid, más bien: ¡'Hemos abrazado el Islam'! La fe no ha entrado aún en vuestros corazones" (Corán 49 : 14)
* Nota: La palabra usada en árabe es A'rab (el versículo fue revelado dirigiéndose específicamente a una tribu de beduinos árabes llamados Beni Asad, no a todos los beduinos de la época.
El Islam se manifiesta a través de la lengua y la práctica de ritos (rezar, ayunar, pagar la zakat...) se manifiesta en lo aparente, mientras que la fe, Al-Iman, se confirma, reafirma, autentifica a través del corazón.
Allah dice: "La fe no ha entrado aún en vuestros corazones"
Efectivamente, porque cuando la fe entra y habita el corazón del musulmán, inmediatamente se traduce en frutos dulces, en las acciones del individuo, en su comportamiento, en sus obras día a día. El creyente es misericordia para todos, no un castigo allá a donde va. A veces sólo con una lengua viperina te conviertes en la peor de las maldiciones para los demás.
La fe ni se hereda, ni son palabras ni expresiones que se recitan, ni es una decisión que se toma “decido ser creyente”. La fe es una experiencia espiritual personal vivida. Son etapas que se atraviesan.
Si todos los musulmanes fueran verdaderos creyentes, no nos sentiríamos confundidos al ver musulmanes que dicen una cosa y hacen lo opuesto, musulmanes que practican el Islam según sus deseos, musulmanes que están a años luz del ejemplo del Profeta Muhammad (saws) aunque se jacten todo el tiempo de seguir su “Sunna” o se auto-proclamen los guardianes del Islam.
Tan simple como cumplir con los cinco pilares y tener una apariencia concreta, equivale en sus mentes a ser automáticamente creyente o más aún, no hago nada pero he nacido musulmán, ya tengo la etiqueta que me hace falta, al fin y al cabo todo se reduce a una etiqueta para algunos. Soy salafi, soy extraña entre extraños, nosotros los ahul Sunna y tonterías similares...Como si a Allah le importasen las etiquetas que los propios musulmanes se inventan y que no tienen nada que ver con la fe. Palabras huecas derivadas de mentes infantiles.
Este tipo de musulmanes conocen a Allah sólo por nombre y no lo conocen en su esencia. Conocer a Allah implica convertirse en la personificación de piedad, amor, misericordia, generosidad, temor, auto-crítica, amabilidad, ternura, belleza, luz...Todo lo bueno y magnifico que recuerda a Allah. (claro, primero hay que tener un concepto correcto de Allah, quien cree en un dios cruel, sectario, temperamental, tiene que volver a hacer sus deberes desde el principio)
El creyente inspira confianza aún cuando se cometen injusticias en su contra, porque se sabe que no reaccionará de manera similar, se sabe que no reaccionará con la emoción, se sabe que perdonará y olvidará, se sabe que reemplazará maldad con bondad, sobre todo si tiene el poder de devolver el mal.
El Iman, la fe, no consiste en decir: Allah existe, Allah es el más grande...No, ese iman emocional es tan estéril como lo es el hecho de ser musulmán. La emoción no produce creyentes tampoco. Hay que experimentar y vivir la fe.
Soy creyente, luego soy musulmán y nunca vice-versa.
La fe siempre va acompañada de las buenas obras, del carácter ejemplar, de lo refinado, de lo justo : Allah dice (lo traducido en español) " por ejemplo :
"¡Creyentes! ¡Respetad vuestros compromisos!" (La Mesa Servida-1) Cualquier compromiso entre tú y otra persona de cualquier tipo de creencia o género, es una obligación cumplirlo.
Ser musulmán implica en algunos casos todo lo opuesto, por qué? Porque simplemente se es musulmán nada más. Luego no hay ningún mérito en ser musulmán, pero sí lo hay en ser creyente, requiere un esfuerzo, un yihad permanente.
Existe una necesidad imperiosa de re-descubrir el Islam, re-descubrir a Allah, re-descubrir la vida del Profeta si es que queremos ser verdaderamente lo que aclamamos ser. Parecer y ser no son sinónimos.
PD : Allah se dirige en el Corán a los muminun -creyentes- y no a los musulmanes. No existe versículo alguno que diga "¡Oh Musulmanes!"

Leer Sura Los Creyentes para averiguar a qué "secta" pertenecen.

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